Fué sorprendente la respuesta a la convocatoria de la Marcha naranja convocada por Plataformas en defensa de la Ley de Dependencia de la Comunidad Valenciana.
Más de dos mil quinientas personas se sumaraon el pasado sábado a la manifestación la Marxa Taronja convocada por las plataformas en defensa de la Ley de Dependencia de la provincia de Alicante, en un día de temperatura extremadamente inusual, lo que provocó la suspensión de varios autocares fletados por culpa de la nieve caida y la amenaza de nuevas nevadas en varias comarcas de la provincia de Alicante. A pesar de las inclemencias del tiempo, varios miembros de la Plataforma de l’Alcoià-El comtat asistimos a la misma.
Alrededor de las 18 horas, conforme estaba convocada, se inició la marcha desde la estación RENFE, bajando por la avenidad de Salamanca y rodeando la plaza de la Estrella para recorrer toda la principal arteria comercial de la ciudad, la avenida de Maisonnave, lugar donde se apreciaba perfectamente el número aproximado de particpantes, siendo en apreciación de la policía local, alrededor de dos mil personas y la organización en dos mil quinientas.
Toda la zona estaba con un trasiego constante de gentes que iban y venían en sus compras navideñas y se les facilitó una octavilla explicando la razón de la marcha.
Una agrupación de «dolçainers i tabaleters» abrían la marcha entonando aires navideños con la interpretación de villancicos y sintonías populares, mientras que una mayoría saltaban gozosos y en armonía, tratando de entrar en calor, pues a esa hora y por esa zona, la temperatura era de 7 grados, pero con una sensación térmica muy inferior.
Seguimos por la avenida del Doctor Gadea en dirección a la Casa de las Brujas, sede del gobierno valenciano en Alicante, donde tras una pequeña espera a que la cola de la manifestación entrase alrededor de un amplio círculo delante de la citada sede.
Se dió lectura a las adhesiones recibidas de personalidades de las artes y las letras, asociaciones varias de personas con diversidad funcional, asociaciones de vecinos, partidos políticos y sindicatos, particulares…
En representación de las diversas plataformas asistentes, una representante de cada una de ellas, hizo una lectura del desarrollo de la manifestación, agradeciendo públicamente y de manera especial, a todas las personas con movilidad reducida que en unas concidicones climatológicas tan extremas, se hubiesen sumado a la marcha lo que da una idea muy real de la unidad demostrada a la hora de reclamar sus derechos de manera visible, en plena calle.
Tras la lectura del manifiesto, se concluyeron los actos programados, no sin antes terminar con la interpretación, por parte de los «dolçainers i tabaleters» del villancico que todos coreamos y que dice…
En el portal de Belén ha nacido un dependiente,
que le pasa al presidente que no escucha a la gente.
Ande, ande, ande que poca vergüenza,
ande, ande, ande que poca vergüenza…
Sorprendente es la incapacidad que ha demostrado el gobierno valenciano para aplicar una ley que no es ni más ni menos que el cuarto pilar de una sociedad solidaria, ningún pais con una trayectoria democrática social que se preste excluye a los más necesitados de las coberturas sociales necesarias para llevar una vida digna.
Sorprendente es que la ciudadanía no responda de forma multitudinaria como con la gerrra de Irak. Sorprendente es que el gobierno valenciano incumpla una y otra vez lo dispuesto en la ley, ya sean valoraciones, prestaciones ecocómicas e incompatibilidades con las diferentes servicios que debe ofrecer el catálogo de ayudas y prestaciones.
Sorprendente es también que los colegios de abogados se presten a dar cobertura a la gente que se encuentra en situaciones verdaderamente injustas, bienvenidos sean al mundo de la solidaridad.
Sorprendente es que en este pais valenciano gane la derecha por goleada, donde se ve a las claras en que prioriza el dinero público.
Sorprende y cabrea que no se puedan exigir responsabilidades a los responsables de esta ilegalidad , pero responsabilidades personales, ya que estas decisiones políticas perjudican a personas con nombre y apellidos, que por fin ven reconocido su derecho a un ayuda pública,no pido que se les meta en la cárcel,pero si que se les prohiba el derecho a representar a nadie en nombre de nadie y que pagen con servicios a la comunidad por 3 años como mínimo.
Cabrea y mucho que la gente crea que la solidaridad es sólo una palabra .