20 Septiembre de 2014
El año natural comienza el día 1 de enero atendiendo al calendario solar, pero en Ibi especialmente parece más natural que el año comience pasadas las fiestas patronales. Unas fiestas que siempre se viven con gran intensidad, donde el esfuerzo colectivo de muchas personas permiten al resto disfrutar de actos, juergas, espectáculo, tradición y diversión a veces sin límite. Son muchas las tertulias que se propician alrededor de la fiesta con la intención de mejorarlas y contar con una mayor participación, una de las objetivos más deseadas por todas las personas que se entregan incondicionalmente a la fiesta, cargos festeros y directivas que se enfrentan año a año a todo tipo de esfuerzos, críticas y desencantos, también recogen agradecimientos sinceros y emociones que quedan grabadas para siempre en su historia personal.
La oferta turística y hotelera aprovecha el mes de septiembre, últimamente muy calurosos, para ofertar estancias de un coste menor que en días estrella de agosto. Cada año que pasa la oferta cultural, musical y lúdica a nivel nacional es más amplia y cumple más con las expectativas de los jóvenes ávidos de experiencias nuevas o para repetir aquellas que han sido de su interés. El coste de las derramas festeras compite difícilmente con todas estas ofertas, es por ello que se ha de reinventar lo inventado, se ha de buscar nuevos espacios, actos o proyectos que cumplan con la exigencia cada vez mayor de los posibles candidatos a participar de la fiesta de forma activa y de todos aquellos que hacen grande la fiesta con su asistencia a los actos.
Hay muchas propuestas que se han ido quedando en el tintero, propuestas que han ido en los programas electorales del Partido Socialista y que ni siquiera son objeto de debate, y que cualquier día próxima a las elecciones el PP se sacara de la manga como por arte de magia. Hay otras propuestas que se van sumando como ha sido la propuesta del concejal de fiestas Juan Valls que por primera vez se interpretó por las catorce bandas de música junto con la Unión Musical y Castell Vermell al unísono el Himno de Ibi frente al Ayuntamiento, animando y facilitando a todo el público en general a cantar un himno que muchos ibenses desconocían. A pesar de ser una propuesta creativa copiada de localidades vecinas ha sido todo un acierto, pero las propuestas de mayor calado no acaban nunca de llegar. Es necesaria la implicación de todas las administraciones públicas para participar de uno de los espectáculos y tradiciones más preciados para nuestra identidad, sociabilidad, divertimento y sobre todo entendimiento social, las fiestas patronales son el pegamento ideal de la sociedad que compartimos con nuestros vecinos y vecinas.
Damos la enhorabuena y mil gracias, como año tras año se merecen todos los que hacen posible tanto espectáculo debidamente organizado, especialmente a la Comisión de Fiestas de Moros y Cristianos y a todos los cargos de las distintas comparsas que se desviven por hacer fiesta a costa de un gran esfuerzo personal y familiar durante todo el año. Pero no podemos dejar de pensar que sobre todo hay que conseguir mucha más participación, ubicación para las comparsas, fórmulas para abaratar costes que permitan precios más asequibles y para todo ello sin duda es necesario abrir el debate a la ciudadanía.
Susana Hidalgo