11 de diciembre de 2013
Las continuas protestas por parte de la ciudadanía a las que se tiene que enfrentar el presidente de la Generalitat Valenciana Alberto Fabra, han dado pie para conocer hasta qué punto son capaces en el Partido Popular de amordazar a la población.
Después de utilizar la inauguración del Museo Valenciano del Juguete como pretexto para esconder sus miserias en Ibi, donde el gobierno valenciano del PP recibió todo tipo de abucheos e increpaciones, Alberto Fabra y sus secuaces han seguido las inauguraciones continuando la agenda programada como si aquí no pasara nada, como si tales protestas nacieran de un descontento inventado o absurdo por parte de una ciudadanía, que en realidad está harta e indignada hasta la saciedad.
Como no tuvieron bastante en Ibi y no se sofocan ni avergüenzan de nada, Fabra acudió la semana pasada, junto a la ministra Ana Pastor y el alcalde de Xátiva Alfonso Rus, a inaugurar la restauración de un convento, visita que se convirtió de nuevo en un calvario para los dirigentes del Partido Popular. Varios centenares de vecinos y trabajadores de Canal Nou que habían acudido con la intención de protestar, eran retenidos a decenas de metros con sus carteles, con fotos boca abajo de Fabra que mostraban en señal de repudio.
En su recorrido, la comitiva tuvo que pasar por delante de las vallas de un colegio público, el Taquigraf Martí. En ese momento los niños estaban en el recreo y al reconocer a Fabra comenzaron a gritar “que torne Canal Nou”, “Volem Canal Nou” y “Fabra dimissió”. José Antonio Vidal, concejal de Seguridad y Recursos Humanos del PP local comenzó a grabar a los niños. Como muestra, la foto publicada en el periódico digital plural.com (para acceder a esta noticia , pincha aquí). Si la acción del concejal del PP ya produce una indignación infinita, aún resulta más alarmante lo que sucedió a continuación, ya que pasada la comitiva, con los niños comenzando a retirarse a las aulas para proseguir las clases, la policía accedió al recinto para acallar a los niños que aún gritaban y se pusieron en contacto con la directora para, al parecer, intentar identificar quién había incitado aquellas protestas. Según dijeron a periodistas posteriormente los docentes, la reacción había sido espontánea por parte de los niños, que desde que se cerró Canal Nou vienen reclamando, por ejemplo, que vuelvan a pasarse los dibujos animados en valenciano que veían por las mañanas.
Ya sabemos de lo que es capaz Rajoy, de aprobar una ley mordaza para acallar a la población a pesar de que el comisario de Derechos Humanos del consejo de Europa, Nils Muiznieks, ha tachado de «muy problemática» y advierte de que la tratará con el Gobierno español «si va más allá». Alberto Fabra ha anunciado que “vamos a denunciar los comportamientos punibles”, aunque al tiempo decía que estaba dispuesto a aceptar las protestas siempre y cuando se produzcan “manteniendo las formas”. Es curioso que Rafael Serralta, en el pasado pleno, defendiera a los «reivindicadores locales», por exigir de forma educada y tachara a los «foráneos» de dirigirse con mala educación. Yo me pregunto ¿Como lo sabe? ¿Los grabó a todos?. No defiendo en absoluto los insultos personales a ninguna persona, ostente un cargo público o no, ahora bien, me parece un insulto a la inteligencia muchas de las provocaciones y declaraciones de Alberto Fabra, Cotino, Rus, ect, en las cuales «educadamente» se ríen en nuestra cara y denigran el cargo que dignamente deberían ostentar.
A menudo “esos locos bajitos” nos dan lecciones de sinceridad y el hecho de que griten “Volem Canal Nou” y “Fabra dimisió” no creo que sea muy punible, más bien una expresión que, dadas las circunstancias, es un clamor de puro sentido común.
Susana Hidalgo
Me extraña mucho que un niño que está jugando en el recreo pierda ni un minuto de su tiempo de juego para ir a decirle a fabra que dimita si no hay alguien que le ha dicho que lo haga. Seguramente ese niño no sabrá ni quien es fabra , yo por lo menos cuando era niño no perdía mi valioso tiempo de juego en pedirle la dimisión a nadie, sinceramente los políticos no me interesaban en absoluto
Yo desde luego que la Generalitat ayude al Asilo de viejectos de Ibi y a otros más a tener una televisión autonomica