05 de diciembre de 2013
Tenemos nueva concejal de Hacienda, Sara Díaz, la cual tiene por delante una tarea difícil si se quieren cambiar los hábitos y las malas costumbres. Estoy convencida que ella no hubiera dejado el área de Bienestar Social, pero las circunstancias mandan y a menudo las circunstancias tienen nombre y apellidos.
Lo que ya le pedimos en el pasado pleno a la concejal de Hacienda es que le exigiera a Maite Parra el pago de los gastos generados en letrados y procurador al denunciar a un vecino ibense por llamarla corrupta en el comentario de un medio digital.
Por otra parte, el pasado mes de noviembre Maite Parra, la exalcaldesa que sigue siendo diputada en las Cortes Valencianas, solicitó antes de abandonar el Ayuntamiento, que le abonaran la ayuda a la ortodoncia que lleva. Espero que se lo hayan denegado desde el departamento de Hacienda y Personal, ya que la alcaldesa no puede cobrar dos sueldos públicos y no le corresponde según el convenio.
Este convenio y muchas cosas más relacionadas con el dinero público serán las que los socialistas pongamos encima de la mesa porque los tiempos han cambiando considerablemente y las políticas también. Estoy convencida que seguirán pasando un tupido velo por todos los presuntos pelotazos que se encuentran enterrados en el área de Hacienda y Contratación, y ante cualquier pregunta o solicitud de información de los grupos de la oposición, nos dirán, con voces más amables, que «hay que mirar para adelante». Juan Valls no les presenta mucha oposición en estas cuestiones.
Hace años recogíamos alimentos para los negritos del África tropical, que siguen pasando mucha hambre y, para que no vengan a España los separamos de Europa con una alambrada de cuchillas que el presidente del gobierno no sabe si cortan o no cortan, pero ahora recogemos día si y día también alimentos para nuestros vecinos. La gran estafa llamada crisis, el empobrecimiento del país, la reforma laboral, los brutales recortes y copagos, han hecho de nuestro país una nueva África tropical. Pero según el PP no hay por qué preocuparse, si en una década la gente pasa hambre, los jóvenes se “movilizan hacía el exterior” y pierden la esperanza de un mundo mejor en su país, es un precio justo por una «recuperación» gracias a sus políticas tan estupendas de «jarabe de palo». Decía Sara Díaz en el pleno ante las críticas de los grupos de la oposición por las politicas del PP , “no somos ogros, se ha gastado más de lo ingresado y no voy a entrar en quién tiene la culpa». Claro como el agua.
Susana Hidalgo
Es que si pensabais lo contrario o no la conoceis o es que sois muy bobos
Esta chica no tiene remedio, ¿pues no que se quiere arreglar la boca con dinero público?. Pero Parra si tú no lo que no tienes es arreglo. Qué degeneración. Lo que no tiene arreglo no tiene arreglo y además es imposible. Parra aplícatelo.
Este pueblo ha pasado por malas rachas, malos gobernantes, pero hasta el punto en el que nos encontramos últimamente yo nunca lo conocí. ¡A robar a las peñas rojas!
Olvidada, que no querida, Mayte, ¡que te den!