Ayer se llevó a cabo una moción de censura contra la compañera Maite Gimeno, alcaldesa de Castalla. Una moción avalada por el PP de Castalla y el PP díscolo, llamado para la ocasión UCID.
La argumentación para tirar a Maite de la alcaldía fue realmente escasa, poco creíble y muy interesada. Es vox populi en Castalla que la derecha, fuerza más votada en las ultimas elecciones, permitió el pacto PSOE-Compromis-UCID esperando que Maite Gimeno no fuera capaz de afrontar la gestión municipal. Dos años después y agotando el ecuador de la legislatura, fecha clave para presentar una moción de censura, PP y la UCID han decidido olvidar repentinamente sus diferencias, sacrificando la cabeza de José Luis Prats, de momento, para apartar a Maite Gimeno de la alcaldía porque ha dado la talla con creces, y no se pueden permitir en un feudo histórico del PP que el PSOE ganará con mayoría absoluta en los próximos comicios.
Maite Gimeno, no sólo ha conseguido una buena gestión, a pesar de todas las dificultades que le han puesto en el camino, además ha sido capaz de liderar la lucha contra la incompetencia de la Generalitat Valenciana, defendiendo a los usuarios del Taller Ocupacional y la tremenda injusticia y barbaridad del recorte en el servicio de ambulancias SVB en la comarca. Ha removido Roma con Santiago para conseguir la subestación eléctrica que tanta necesita esta comarca básicamente industrial para seguir trabajando, y sobre todo ha escuchado a la ciudadanía y ha gobernado con trasparencia y operatividad, todo ello en los tiempos que corren, una crisis devastadora y sobre todo una administración superior, la Generalitat Valenciana arruinada y repleta de diputados en las cortes del PP imputados en casos de presunta corrupción. Y en cuanto a la comarca, Maite Gimeno se ha visto rodeada de alcaldes como el de Onil, que esta en la luna de Valencia y la alcaldesa de Ibi, que persigue a todos los que creen que es una corrupta, y no ha sido capaz de exigir a la Generalitat Valenciana absolutamente nada, todas las reivindicaciones las ha hecho de cara a la prensa y absolutamente nada más, esta muy ocupada en pasear a su perrito, y en limpiar su nombre. A pesar de esconderse y evitar todo tipo de responsabilidades, una gran parte de la ciudadanía cree a ciencia cierta que es una presunta corrupta.
Estamos seguros que Maite Gimeno y el grupo Compromis seguirán trabajando por Castalla, esta vez desde la oposición. Esperamos que en las próximas elecciones el pueblo sepa valorar una buena gestión y demuestre su madurez política.
Ánimo compañera.
