Estos días asistimos con asombro a lo que sin duda podemos calificar como el mayor deterioro del sistema democrático y estado de derecho de nuestro país. Vemos como el Partido Popular ha realizado operaciones con dinero de dudosa procedencia, enriqueciendo a los suyos y pidiendo esfuerzos económicos al resto de ciudadanos.
No sabemos si existe financiación irregular del Partido Popular, pero todo indica que las cosas en el partido que ampara la derecha ideológica de este país no se han hecho conforme a Ley, apareciendo una contabilidad B que pagaba sobresueldos en sobres a la cúpula nacional y a sus allegados.
Este escándalo, unido a la trama Gürtel, al caso palma arena y a un sinfín de casos de corrupción del Partido Popular repartidos por toda la geografía española, son suficientes para que den explicaciones con pelos y señales a los ciudadanos, devuelvan todo el dinero a las arcas públicas y dimitan.
Como político y defensor del sistema democrático, siento vergüenza de que personas que nunca creyeron en el proyecto democrático de este país, como son gran parte de la cúpula del Partido Popular, hayan utilizado sus años de mandato para enriquecerse ellos mismos y a unos pocos amigos, mediante la privatización de servicios y construcción de obras multimillonarias, con sobrecostes, que son insoportables de mantener económicamente por las administraciones y que vendemos posteriormente a precio de saldo, que han llevando a nuestro país a una situación económica al borde del abismo. Nosotros en la Comunidad Valenciana y en Ibi sabemos mucho de estas obras, como son el aeropuerto sin aviones de Castellón, la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, la ciudad de la Luz de Alicante o el Teatro Rio, la piscina climatizada y el Palacio de Justicia de nuestra Localidad.
El Sr. Rajoy y el Partido Popular, que en campaña electoral decían a los ciudadanos que tenía la fórmula mágica para salir de la crisis y terminar con el paro, han engañado a millones de españoles, aplicando medidas económicas y laborales que perjudican a la gran mayoría de ciudadanos, especialmente a los más desfavorecidos, y benefician a unos pocos. Estas medidas además se ha demostrado que no sirven para paliar el paro, hoy en día la mayor preocupación de los ciudadanos, que roza los 5 millones de parados.
Las personas que ostentamos un cargo público, seamos del partido político que seamos, incluidos los del Partido Popular, no podemos permitir que se nos compare con estos “chorizos” que utilizan la democracia para enriquecerse y tenemos que decir basta. Si realmente creemos que no todos los políticos somos iguales, que no todos aceptan sobres con dinero B y que estamos trabajando por el bien de los ciudadanos, debemos ser totalmente intransigentes con la corrupción y con los que la practican, sean de donde sean y vengan de donde vengan. Es el momento de airear las instituciones. Hay que levantar la alfombra para ver lo que hay y limpiar y eso es un trabajo conjunto de políticos y ciudadanos. Sin los ciudadanos nada se puede hacer.
Sé que es difícil, que hoy por hoy los ciudadanos nos ven como una clase privilegiada, pero esa es la lucha que nos toca hacer a los hijos e hijas de los que durante tantos años lucharon por la libertad y la democracia en nuestro país y que están viendo como en unos pocos años y por parte de algunos impresentables que anhelan tiempos pasados, el estado de bienestar creado con tanto esfuerzo se viene abajo.
Alberto Hernández Sola
Concejal del Grupo municipal Socialista de Ibi.
Secretario de Organización del PSPV-PSOE de Ibi.
Lo más lamentable es que al final lo que cunde es que todos son iguales y creo que no es esto así ni por asomo. Estoy convencido de que en la política los honrados son la inmensa mayoría, lo que pasa es que esos hacen su trabajo de forma callada y no se les ve, y son un puñado de «chorizos y Ladrones» los que destrozan la política y a los políticos en su conjunto. Frente a esos ladrones no hace falta tanto pacto para la transparencia, únicamente hace falta aplicar la ley, de de verdad.
los más intolerable es que en los partidos no pongan ningún interés en apartar a los ladrones de sus filas y ponerlos en manos de la justicia y presentarse como acusación particular contra ellos, seria uno de los pilares para que los ciudadanos puedan volver a confiar en los partidos politicos y sus representantes si no estamos abocados a un desastre politicamente, el P.P esta en el estercolero de la corrupción y en pódredúndré politica y personal mente, todos sus dirigentes y cargos publicós, echemos una mirada a comunidad valenciana, zaplana, camp, fabra, todos los dirigentes populares anestado o estan inbestigados por la justicia, sin dejarnos a mayte parra, » la alcaldesa de ibi» no se cuantos procesos tiene aviertos, bueno esto seria interminable,pero si los partidos sea del color que sea no tiran de sus filas a esos ladrones no terminaran nunca el espolio de las arcas publicas…
Totalmente de acuerdo con tu artículo, hay que levantar las alfombras de todas las instituciones y poner a cada uno en su sitio. Los ciudadanos no son tontos y aunque en un principio pueden repartir para todos, cuando llegue el momento sabrán distinguir. Hay que luchar para que se agilicen los procesos judiciales. Una justicia lenta es lo peor, porque al final se convierte en injusticia.