Vicenta, ¿sabías que la Generalitat de Camps debe hoy 45.000 millones de euros, la mayoría de ellos a empresas valencianas a las que tarda hasta 2 años en pagar?. No está mal teniendo en cuenta que esa deuda es casi 3 veces mayor que el propio presupuesto para un año de la Generalitat, que es de 16.000 millones de euros, ¿verdad?
Camps ha convertido a la Generalitat Valenciana en el mayor moroso de la Comunitat, poniendo directamente en peligro a cientos de empresas y miles de empleos de los valencianos y las valencianas.
Camps debe dinero a los abogados de oficio, a los bomberos, a la gente que pidió ayudas a la vivienda, a las constructoras de obra pública, a Correos, a las compañías telefónicas… ¡¡hasta a las empresas que le pusieron los urinarios para la visita del Papa en 2006!! ¡¡y a las patronales de los empresarios!!
Pero, ¿cómo es posible que la Generalitat Valenciana tenga esa deuda y los valencianos suframos la peor educación (40% de fracaso escolar) y la peor sanidad pública?
Si no se lo han gastado en hacer que vivamos mejor, ¿en qué se ha gastado Camps nuestro dinero?
Una Generalitat austera y útil
Los Amics del Canvi queremos una Generalitat austera y que gaste bien nuestro dinero. Por eso Jorge Alarte propone dejar de gastar en lo que no vale para nada:
Reducir un 15% el gasto que no es para educación, sanidad o bienestar social
Reducir a 7 el número de Consellerías (Camps tiene 13) y un único Vice-President
Reducir a la mitad el número de cargos de designación directa de la Generalitat (asesores, etc.)
Reducir a un máximo de 30 las empresas y fundaciones públicas, ¡hoy hay 130!.