Por Germán Martínez, Secretario de Cultura, Fiestas y Tradiciones de Joves Socialistes d’Ibi
Querida Mayte, he aquí de nuevo aquel que tanto se molesta en escribirte, triste, ya que puede que sea la última ocasión. Pero no lo lamente aún, nunca se sabe, por más que uno tenga estómago y se prepare psíquicamente para escuchar lo que tiene que escuchar por boca de la máxima autoridad de su municipio, nunca es suficiente, porque usted, como gran Diosa que es, se supera día a día.
El pleno del lunes 13, Santa (paciencia) Lucía, fue más accidentado de lo normal, un salón a rebosar quedaba pasmado al ver la silla de su último ex (amigo) vacía sin que se diera la más mínima explicación al respecto, incluso se vetara la moción presentada para esclarecer el asunto que tantos periódicos está llenando al son de “ni hablar del peluquín”; uno que le escribe ni se inmutó, no esperaba menos de su Señoría.
Hubo ciudadanos más o menos indignados, hubo abucheos, aplausos, risas; hubo llamadas de atención, justificadas por supuesto, a salidas de tono de cierta ciudadana, lo que no se si está tan justificado es lo que le hizo perder la calma a la simple mortal, sus palabras, Mayte: “la situación económica de España es peor que la de la Guerra Civil” lo dicho, se supera.
Creo que el momento estelar de su intervención fue cuando menospreció el poder de convocatoria de los partidos de la oposición, ya no sólo porque el salón estaba diez veces más concurrido de lo habitual, si no porque lo argumentó diciendo con el máximo de los desprecios: “sólo hay que ver la cara de quién hay”. Este mortal no pudo más y huyó despavorido para no decirle: “¿Perdona? ¡¿Pero…y la tuya?!” Estimada alcaldesa ¿Ignora usted que no se habla de otra cosa en este santo pueblo que de las grabaciones de Onsurbe, de sus “mojaditas” y sus “meneos”? ¿No cree que el pleno se llenó simplemente porque esto huele malamente y la gente se siente pisoteada? ¿Qué pasa con nuestras caras? ¿Por qué le molestamos tanto? Lo dicho, huí y lo volvería a hacer, por amor a la democracia, sé que no me entenderá y que dirá: “Pues vaya usted con Dios”, es normal pensar así cuando se ignora que uno de los valores superiores de nuestro ordenamiento jurídico es el pluralismo político (art.1 de la Constitución). Y si ignora el 1 mejor no le hablo del 164, ese que dice que las sentencias del Tribunal Constitucional tienen el valor de cosa juzgada a partir del día siguiente a su publicación en el BOE; sentencias que han legitimado el derecho de los ciudadanos a grabar las sesiones plenarias de los ayuntamientos, sesiones que suele grabar un ciudadano (hijo de esa vecina a la que usted tanto llama al orden) y que usted suele expulsar sin fundamento y por la fuerza, acusándolo de boicoteador, socialista y poco menos que le aplica la Ley de Vagos y Maleantes; sólo porque le habrá visto sentado cerca de nosotros en ocasiones.
No imagina la de gente que me ha preguntado si me ha vuelto a expulsar su señoría, ¡A mi! A este mortal que lo único que puede hacer es rogarle que se abstenga de volver a aludir a Joves Socialistes como artífices de aplausos, palabras u otras acciones u omisiones que realiza el público del salón de plenos en el ejercicio de su libertad individual; y esperar (sentado y lejos) a que atienda mis peticiones.
Esa ciudadana a la que la alcaldesa tiene tan especial cariño, porque entiende que la democracia debe ejercerse en todos los ámbitos y se rebela contra el abuso de poder y no soporta los discursos llenos de mentiras y malas intenciones, tendentes a seguir engañando a los ciudadadanos, agradece de todo corazón que no estemos en la misma situación de la guerra civil, de lo contrario ya la hubieran rapado el pelo al cero y paseado en un burro por todo el pueblo. Menos mal que tenemos una democracia y una constitución, pese a quien pese.
A esta mujer se le va de las manos, como esto siga así el próximo artículo lo tendrás que titular algo así como: ¡Agüita con la Mayte!
Tienes toda la razón. Con esas palabras tan «cariñosas» de la alcaldesa hacia los asistentes a los Plenos, parece que lo que persigue es que nadie asista. Porque creo que no todos los asistentes son socialistas. Por tanto si cualquier persona sin adscripción política desea asisitir, antes de que se le califique, se abstendrá. Luego dirá que es muy partidaria de la participación.
Y además que no tiene el más mínimo derecho a hablar con desprecio de aquellos que no pertenecen a su cuerda política. La constitución consagra el derecho de asociación y participación.
Como siempre, la alcladesa ha hecho retransmitir la cena del PP. Puedo admitir que si no representa coste para el Ayuntamiento, y eso llena de forma gratuita minutos en Tele Ibi se haga. Pero que se haga PARA TODOS. Y no solo partidos políticos. Cualquier particular (el PP es una entidad privada) debería poder enviar su vídeo de bautizo, comunión, boda o cualquier almuerzo o comida familiar. Tiene tanto derecho como ella, y lo contrario es abuso de poder. Aunque a ella le importa un pepino.
Por cierto que cuando el locutor que presentó quiso hacer el chiste con «déjense las grabadoras en el coche», al menos su compañera puso una cara…