Las organizaciones en defensa de los Derechos Humanos han denunciado duramente la inminente lapidación de una mujer iraní, Sakiné Mohamadi Ashtiani, de 43 años, acusada de mantener «relaciones ilícitas» con dos hombres antes de la muerte de su marido, de momento se ha suspendido la condena. En el programa de RNE “ En días como hoy” hablaron ayer del tema con Mansur Escudero, presidente de la Junta Islámica de España y vicesecretario general del Liderazgo Islámico Popular Mundial y Alfred Cerdán, portavoz para la Pena de Muerte de Amnistía Internacional España .
Resumimos las declaraciones por que nos parecen interesantes, y sobre todo entra en la página de Amnistía Internacional para apoyar la campaña de firmas y denuncia la terrible injusticia que se puede cometer con Ashtiani.
https://www.es.amnesty.org/ssl/socio/?origen=google
La lapidación es una práctica atroz e inhumana que se practica en varios países ;Irán,Indonesia (una provincia) estados del norte de Nigeria, al norte de Somalia, aunque Amnistía Internacional advierte que es una práctica que se aplica casi en secreto por lo que puede practicarse en otros paises. La mujeres acusadas de infidelidad son condenadas a ser enterradas hasta el pecho y se les apredea hasta su muerte.
Mansur Escudero. Presidente de la Junta Islámica de España
La ley islámica no apunta al deber para la lapidación. No hay ningún pasaje en el Coran que permita la lapidación, es una lectura equivocada, no hay motivos para que se aplique, no se justifica con el ejemplo del profeta, en algunos países ha pasada a la jurisprudencia jurídica, es una interpretación política interesada. El Coran dice que hace falta cuatro testigos que presencien la penetración para que se azote a una mujer y así castigar su conducta. Se trata del interés de la clase dirigente para preservar sus privilegios, la mayoría de iraníes están en contra de estas prácticas. La protesta no sólo han venido de las organizaciones internacionales sino también de la comunidad islámica.
Alfred Cerdán. Portavoz para la pena de muerte de Amnistía internacional
En estos momentos no sabemos en que situación esta Ashtiani, primero exigimos que se aclare su situación jurídica ya que ahora la acusan de asesinato, la sentencia a muerte está en suspenso por la presión internacional, se han enviado100.000 firmas sólo desde España por Amnistía Internacional. Podemos ser optimistas porque la experiencia nos dice que la presión internacional funciona aunque hay que seguir presionando. Irán recoge en su código penal la lapidación excusándose en el Coran.
Irán ratifica la declaración universal de los derechos humanos, sin embargo su código civil recoge la lapidación. La justicia iraní insiste que es una castigo impuesto por la ley islámica. Una terrible contradicción que nos debe obligar a todos a presionar de la forma que podamos para no permitir estas barbaridades.
Noticias como estas me descomponen el cuerpo. No entiendo como todavía a estas alturas se puede consentir que paises en nombre y en defensa de no se que libro sagrado, se atrevan a ofender a todo el mundo actuando contra las personas de esa manera tan cruel. La comunidad internacional no debe de dejar a la suerte de unos cuantos miles de firmas el destino de la vida de ni siquiera una sola pesona.