Por Herick Campos
Mientras el Presidente de la Generalitat busca las facturas de los trajes, la Generalitat no tiene en vigor ni aplicándose ninguna medida.
Si los ciudadanos quieren pedir ayudas o beneficiarse de medidas especiales, no encontrarán nada para hoy o mañana.
Si las empresas o autónomos quieren cobrar sus deudas, no podrán hacerlo ni hoy, ni mañana.
Si los promotores quieren hacer VPO en venta o alquiler, no encontrarán facilidades ni hoy, ni mañana.
Si los ayuntamientos quieren poner en marcha las acciones del “plan Confianza”, no tendrán garantías de pago real ni hoy, ni mañana.
Si el sector del turismo quiere obtener las ayudas del plan de 35 millones de euros anunciado, no les darán nada ni hoy, ni mañana.
Si los sectores tradicionales e industriales o las PYMES y autónomos quieres ayudas especiales o aprovechar la crisis para afrontar cambios e introducir innovación, no encontrarán nada ni hoy, ni mañana.
Si los que más sufren el paro quieren ayudas especiales por parte de la Generalitat, que tiene competencias en la materia, no las encontrarán ni hoy, ni mañana.
Es cierto que algo se hace, pero si vemos su descripción detenidamente, podemos comprobar como son actuaciones, programas y ayudas que ya estaban en marcha hace tiempo y que ahora el único cambio que ha habido ha sido de nombre.
En definitiva, siguen como los últimos 14 años, prometiendo o cambiando el nombre a programas sin cambios cualitativos o cuantitativos.
La diferencia es que ahora la economía no va, tira sólo por el esfuerzo de trabajadores y empresarios o por las medias nacionales. Ahora toca actuar. Debían haber empezado hace un año e, incluso, en el caso de los sectores industriales, años a tras, por no hablar de diversificar los motores de la economía y no centrarlo sólo en la construcción.
